¡Soy fuerte… Soy invencible…Soy una Mujer!
Josefa Camejo
"No puede haber Revolución sin la participación de las mujeres de la patria”
Hugo Chávez Frías
El origen de esta fecha se remonta a 1910, cuando en la Casa del Pueblo, en Copenhague (Dinamarca), durante la 2° Conferencia Internacional de Mujeres Trabajadoras Socialistas, Clara Zetkin, integrante del Sindicato Internacional de Obreras de la Confección, quien ya había participado en actividades en pro de la mujer en 1886, asistiendo al Congreso de la segunda Internacional socialista en París donde defendió el derecho de las mujeres al trabajo y a la participación en asuntos nacionales e internacionales, así como también, a la protección de las madres, las niñas y niños.
Las diversas protestas realizadas por mujeres exigiendo reivindicaciones y su participación continua en los grandes foros, dieron los frutos esperados, y es así que en 1952 la Asamblea General de las Naciones Unidas, declaró como oficial el día 8 de marzo como un día de acción internacional por los derechos a la paz, al progreso e igualdad social de todas las mujeres del mundo.
Situación de la mujer venezolana hoy:
En nuestro país se reivindica con la llegada de la Revolución
Bolivariana el papel de la mujer, mediante la construcción de un sistema de
protección legal que empieza en la propia Constitución de la República y en la Ley Orgánica sobre el Derecho de las
Mujeres a una Vida Libre de Violencia, que en la actualidad se incorpora su
modificación ante la Asamblea Nacional para incluir otras formas de agresión al
género. La presencia de ese lenguaje
inclusivo contenido en la Carta Fundamental, descubre a quienes estuvieron
ocultas bajo el genérico neutral masculino. Paralelamente, se ha traído el
referente histórico de la participación de las heroínas de la Patria en el
proceso de Independencia, quienes por primera vez se encuentran algunas de
ellas en nuestro Panteón Nacional (Luisa Cáceres de Arismendi, Manuela Sáenz,
Teresa Carreño, Teresa de la Parra, Josefa Camejo, Juana La Avanzadora, Matea,
Hipólita y Apacuana) al lado de nuestros Libertadores, para multiplicar también
este legado en las nuevas generaciones.
De igual
manera, se han implementado a través del Ministerio del Poder Popular para la
Mujer e Igualdad de Género -como instancia ejecutora de políticas públicas con
perspectiva de género- de diversos instrumentos entre los que se destacan la
promulgación de la Ley para la Protección de las Familias, la Maternidad y la
Paternidad; Ley de Lactancia Materna; resoluciones del Consejo Nacional
Electoral (CNE) para la participación política de las mujeres; Inamujer, la
creación del Banco de Desarrollo de la Mujer (Banmujer) y la Misión Madres del
Barrio, dedicados a rescatar mujeres de la pobreza extrema brindando atención e
inclusión en proyectos socio-productivos para el empoderamiento en diversos
ámbitos.
GUARDIANAS DE LA
REVOLUCION Y DE LA PATRIA SOCIALISTA:
El Comandante,
Hugo Chávez Frías siempre mantuvo una
lucha sostenida para que la mujer venezolana ocupara el lugar que le
corresponde en la construcción de la Patria Socialista. En un acto de
Juramentación de las Mujeres Bolivarianas en el Teatro Teresa Carreño en el
2010, el líder de la Revolución Bolivariana
se declaró feminista, al tiempo que agregó que todas las mujeres:
jóvenes, estudiantes, trabajadoras, los movimientos feministas y las
revolucionarias, deben constituirse en Guardianas de la Revolución y de la Patria
Socialista.
Nuestro Presidente
Obrero, Nicolás Maduro Moros, continuó ejerciendo esa línea feminista del
Comandante Supremo, y hoy su Consejo de Ministros está compuesto por el 33% de
valiosas mujeres que ejercen importantes funciones en el Poder Ejecutivo, a
saber: Delcy Rodríguez, Vice-Presidenta Ejecutiva y Ministra de Finanzas,
Carmen Meléndez-Interior y Justicia, Gabriela Jiménez-Ciencia y Tecnología,
Noris Herrera-Comunas, Carolys Pérez-Mujer, Evelyn Vásquez-Atención a las
Aguas, Greicy Barrios-Agricultura Urbana, Yamilet Mirabal-Pueblos Indígenas,
Mirelys Contreras-Servicio Penitenciario, Magaly Henriquez-Desarrollo Minero,
Eneida Laya-Comercio, adicional al importante y valioso grupo diseminado en los
ViceMinisterios, Institutos Autónomos y direcciones generales.
Con igual
importancia debemos resaltar que la mujer venezolana vive hoy su mejor momento
en el Poder Legislativo, pues por primera vez en la historia republicana
nuestro Poder Legislativo está conformado por 119 legisladoras de un total de 277 curules en la Asamblea Nacional
2021-2025 y alcanza un 43% de participación femenina en la generación de
leyes regulatorias de la vida nacional, adicional a que en la conformación de
la Directiva de la Asamblea de cinco miembros, tres son valiosas mujeres. De
este meritorio grupo, la mujer obrera venezolana siente el orgullo de verse
representada en seis diputadas obreras provenientes del movimiento sindical:
Egle Sánchez, Luz C. Chacón, Diva Guzmán, María C. Alvarez, Isabel Torcate y
Carmen Márquez, quienes ya conforman trascendentes Comisiones de Trabajo que
reivindicarán los derechos del pueblo trabajador.
HEROICIDAD
REAL DE LA MUJER VENEZOLANA:
La mujer venezolana
y su grupo familiar se encuentra desde el año 2014 y hasta la fecha, enfrentada
a diario, en su quehacer cotidiano, al asedio financiero, económico y comercial
impuesto por las coercitivas medidas unilaterales hoy ratificadas por la Ley
113-278 del gobierno norteamericano que sanciona a nuestra patria por querer
ser libre y soberano. Estas medidas coercitivas unilaterales impuestas por
Estados Unidos, secuestró nuestro cono monetario, bloqueó las navieras, impiden al acceso a medicamentos,
alimentos e insumos agrícolas que agudizan e incrementan las brechas de
desigualdad social, tal cual misil de
guerra, dejando cráteres en nuestros territorios sociales, siendo las primeras
heridas de guerra para las mujeres,
niños y niñas, por ser más vulnerables y que, desde la Revolución Bolivariana
impulsada por el comandante Hugo Chávez, acariciaron condiciones de vida digna
en un tiempo en que se acortaron esas brechas de la desigualdad establecidas
por la IV república y que creíamos superadas, a pesar de los ingentes esfuerzos
que hace nuestro gobierno revolucionario por capear este dramático temporal con
bonos mensuales a través del Carnet de la Patria a 6 millones de Jefes de
Hogares para intentar cubrir de mínima forma, las necesidades de la familia
venezolana.
En esta lucha
diaria, emerge cual volcán, la heroicidad de la mujer venezolana y patriota en
defensa del asedio a la patria -iguales a aquellas heroínas de hace dos siglos
en el Campo Carabobo- para colaborar en reducir esa crítica brecha que la
afecta; y se levanta con resistencia creativa y constructiva con grandes alas
de libertad enarbolando su dignidad ante las garras imperiales. Ese
resurgimiento podemos visualizarlo en:
ü 1.300.00 mujeres son parte activa y
fundamental de las Milicias Nacionales Bolivarianas,
ü 73.216 Cocineras de la Patria, organizadas en el
Frente Fernanda Bolaños, para elaborar los alimentos de nuestros niños y
adultos mayores.
ü 19.000 Promotoras comunales de Parto Humanizado que
hacen guardias en los centros hospitalarios, para la atención de nuestras
parturientas en comunidades y hospitales.
ü 48.376 Jefas de calle y de comunidad en nuestros
barrios, organizadoras de las entregas de las cajas CLAP a los 6 millones de
hogares de la patria.
ü Heroínas de los cuatro puentes, mujeres de las ciudades
que mostraron fuerza y valentía en la defensa de la soberanía de la patria
aquel aciago 23 de enero del 2019.
ü Mujeres y madres convertidas en maestras para mantener
el nivel educativo de sus hijos en casa por el confinamiento producto del
COVID-19, con resiliencia y fuerza espiritual.
Hoy,
cuando mayores luchas duras y calamidades esperan a la clase trabajadora por el
efecto de la gran crisis de la economía capitalista mundial y a las medidas
coercitivas unilaterales impuestas, profundizadas por la pandemia globalizada, se
hace necesario dar la batalla por una perspectiva independiente de las luchas
de la mujer trabajadora de nuestro país. La lucha por nuestras demandas y
derechos debe hacerse desde la trinchera de clase de las explotadas y explotados
y con nuestros propios métodos, como las luchas contra el aumento de los
alimentos y la carestía de la vida que permita elevar la calidad de nuestros
hogares que en su mayoría, son sostenidos por mujeres solas; obtención de salarios
dignos; consecución de viviendas dignas como las que se adelantan a través de
la Gran Misión Vivienda, entre otras. Estas
y otras son luchas comunes al conjunto que desarrolla la clase obrera organizada
del pueblo también organizado y movilizado en pro de sus reivindicaciones
propias. Por eso, el camino debe ser el de la más amplia unidad en la lucha por
las demandas de las mujeres trabajadoras, junto con nuestros compañeros de
clase, a la vez que bregamos para que el conjunto de la clase trabajadora tome
también en sus manos nuestras demandas como propias, en plena igualdad de
condiciones objetivas.
Hoy, más que nunca, la aguerrida mujer revolucionaria venezolana
defenderá, como sólo ella sabe hacerlo, con la fuerza y dignidad heredada de
las heroínas caídas por la liberación nacional y el socialismo, nuestro legado
histórico, el legado otorgado en nuestras manos por Chávez: nuestra Patria Soberana.
Que no se equivoquen, aquí están las hijas de Guaicaipuro, de Apacuana, de
Zamora, de Bolívar, de Argimiro, de Fabricio y de Chávez prestas y listas, a la
orden de nuestro Presidente Obrero Nicolás Maduro para defendernos de las
pretensiones imperiales. Y solo decimos: Ordene Comandante!
Viva la mujer Revolucionaria, patriota y combativa!!!
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